¿Tu vida es don, llamada y proyecto? Retos de la vocación en la cultura actual.
En el año 1992 el papa San Juan Pablo ll, en el mensaje para XXX Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, comentó que hacía falta una cultura vocacional. Eso fue hace más de 25 años y créeme que ahora en la actualidad es necesario ponerle una atención profunda a esto. ¿A qué crees que se refería el santo padre Juan Pablo ll con la expresión de que hace falta una cultura vocacional? Simple y sencillamente en que es necesario que reconozcas tu vocación como una realidad central y con base en esto puedas compartir tu experiencia vocacional para ayudar, orientar a los demás. Ya que hablar de cultura conlleva hablar de comunidad.
¿Cómo ves? Es fácil decirlo, sin embargo, la cultura actual nos presenta diferentes retos que nos pueden confundir y alejar de nuestra propia vocación generando crisis.
¿Cuales son esos retos?:
- Autorrealización como meta única (ejemplo: “En este proyecto me realizo y hasta ahí”).
La libertad entendida como pura autonomía es decir, “Yo solo me la rifo”. Satisfacer las necesidades a toda costa, esto esta por encima de todo. “Tengo ganas de hacer esto u aquello, sé que está mal pero lo quiero y lo hago”.
Siendo sincero esto es muy atractivo y a la mayoría sino es que a todos nos ha pasado, y se ha extendido tanto al punto de entrar en la educación enseñando que así es el ser humano. Pero, ¡no es así! Eres mucho más que eso. Déjame decirte que uno de los puntos más importantes en los que insiste la vocación de cada uno consiste en que tú eres más que todo lo anterior dicho, más que los egoísmos, más que el individualismo.
Tu vida, un don.
Así es mi amigo, tu vida es un don; eres llamado a un proyecto enorme y dentro de ese proyecto se encuentra la experiencia de relación. Relación con Dios, contigo mismo y con los demás.
Tu vocación recibe sentido cuando comprendes que eres llamado, así con todo lo que tú eres. Con toda la realidad que te ha tocado vivir: tu familia, tu ciudad, tus amigos, conocidos, etc. ¡Eres persona! Y ser persona significa que debes construir tu personalidad proyectándola al misterio Cristiano. Es decir, solamente en Cristo puedes encontrar la verdadera imagen de tu ser. Eres persona y estás llamado a asumir eso que eres para encontrarte con el Dios verdadero. Eso es la vocación.
Dimensión comunitaria de la vocación
Por lo tanto, los demás también están llamados a dar respuesta de lo que son desde su contexto particular, entendiéndolo de esta manera debe de haber fraternidad proyectando la mirada hacia la solidaridad.
No somos seres aislados que pueden resolvérselas por sí mismos, sino que somos eres sociales y nos desarrollamos en sociedad. Por eso la importancia de ver hacia los demás, de salir de uno mismo y trascender, de hacer consciencia de quiénes somos para que la vida adquiera sentido.
Hacia un cambio cultural
Sé que la cultura actual te ofrece un individualismo extremo, el pensar en uno mismo con mis propios intereses, pero no se parte de ahí, sino de algo mas grande. Se parte de un amor que trasciende, de un amor con tanta fuerza para construir la historia y el reconocimiento de la dignidad humana que trae consigo el compromiso para con los demás.
Lo importante es saber quién eres, hacerte consciente de ello para darte a los demás y así, a pesar de las difíciles situaciones que vengan por la cultura, se pueda enfrentar con una cultura de amor, de solidaridad, una cultura vocacional trayendo como consecuencias más vocaciones para aspirar a las metas mas altas de la humanidad.