
22.- Oración del siglo XIV
CRISTO no tiene manos,
 sólo cuenta con nuestras manos
 para hacer su trabajo hoy.
Cristo no tiene pies,
 sólo cuenta con nuestros pies
 para guiar a los hombres
 por el sendero de la vida.
Cristo no tiene labios,
 sólo cuenta con nuestros labios
 para hablar de sí mismo
 a los hombres de hoy.
Cristo no dispone de otros medios
 que nuestra ayuda
 para conducir a los hombres hasta Él.
 Nosotros somos la única «Biblia»
 que los pueblos leen ahora,
 somos el único mensaje de Dios
 escrito en obras y palabras.

